El Ayuntamiento de Barcelona inicia este martes la limpieza de las polémicas pintadas en la basílica del Pi. Como denunció este diario este mismo abril, llevaban más de un año a la espera. El templo del barrio Gótico recibió una marca en la fachada y otra, mucho mayor y problemática, en una pared elevada de difícil acceso donde se conserva un escudo del siglo XIV. La aparición de estos grafitis y otros recientemente borrados de Santa Maria del Mar reavivó el debate sobre el impacto del grafiti vandálico en el patrimonio histórico.


